"El auténtico escritor no se dedica a modular cosas bonitas para los lectores, sino únicamente debe aclararse a sí mismo e interpretar mediante la magia de la palabra su propio ser y sus vivencias, resulte bonito o feo, bueno o malo." Hermann Hesse.
Cita del momento:
-- Terry Pratchett, Brujas de Viaje.
domingo, 26 de julio de 2015
El viejo piano.
sábado, 25 de julio de 2015
Piensa.
Tal vez creas que esa persona es una rancia, que es una antipática... Piensa.
La próxima vez que entres a un comercio no revuelvas como un poseso la mercancía musitando un "ya lo recogerán ellas, que para eso les pagan". Piensa.
A lo mejor no les pagan, o al menos no un sueldo digno, ni todas las horas que van a trabajar. A lo mejor su jornada (pagada) finaliza a una hora concreta pero tiene que quedarse a recoger eso que tú has tirado al suelo, pisoteado y revuelto por no agacharte a recoger, en horas que no les corresponden ni van a ver en su nómina, porque hasta que no esté toda la tienda perfecta, no pueden irse a su casa. Aunque sean las doce de la noche.
A lo mejor esas caras largas son fruto de un recorte injusto de personal para que la empresa doble beneficios, o de una bronca injustificada de los superiores porque lo quieren todo rápido y perfecto, aunque las manos no den abasto y tengan que poner en peligro su salud, física y mental, para ir más rápido y llegar a hacer una el trabajo que deberían hacer tres personas.
La próxima vez piensa que esa persona quizá no tiene elección, que intenta hacer lo mejor posible para atenderte, pero no le dejan hacerlo todo lo bien que quisiera, porque además de sus funciones tiene que hacer otras que no son de su competencia, sólo porque la empresa, de nuevo, ha recortado gastos en puestos esenciales, de los cuales ha mandado encargarse a personas sobreexplotadas sin experiencia en ese nuevo aspecto de su trabajo.
Piensa.
Piensa que aguantar tu mala educación no se la van a pagar en la nómina. Se te ha caido ese objeto, pues recógelo y déjalo al menos sobre una mesa, no tirado en el suelo y pisoteado, para que la siguiente como tú exija otro objeto similar "que no esté manchado de polvo o arrugado", porque a lo mejor a esa persona que se lo pides no le está permitido entrar en el almacén a por otra. Piensa. No es que ella no quiera ayudarte, es que no se lo permiten. No es que se invente que no hay más porque no quiera ir a mirar, es que ¡no-hay!.
La próxima vez piensa.
Y sí, esa persona es afortunada por tener un trabajo, por hacer una jornada mediocre con un sueldo bajo que al menos le permite comer...Pero que tenga algo no significa que ese algo esté bien, no significa que sea todo de color de rosa, y no significa que cuando hay una injusticia se tenga que quedar callado. No.
Hay muchas cosas peores en el mundo, pero eso no es motivo para que las pequeñas cosas que podemos ayudar a corregir las ignoremos porque "suerte que tiene que está trabajando".
domingo, 12 de julio de 2015
Se nos escapa la arena.
Se nos pasa la vida sin hacer ruido, como granos de arena resvalando entre nuestros dedos. Momentos fugaces que no podemos atrapar ni conservar, sólo vivir y recordar.
Se nos escapa la arena del reloj de la Vida y no podemos hacer nada para evitarlo. Miramos atrás con los ojos de la memoria, imaginamos cómo habría sido si aquello que cambió nuestro camino hubiese sido distinto.
O si hubiésemos hecho esto...o lo otro.
Si hubiésemos llegado antes o marchado más tarde.
Si hubiésemos estado o nunca existido.
Si...
Se nos desliza el reloj de la mano para recordarnos que en realidad no nos pertenece. Que somos sólo un recipiente lleno de arena, lleno de memorias, deseos, besos y personas. Que somos nosotros pero también somos ellos. Somos también lo que nos rodea.
Que andamos solos nuestro Camino, pues a solas hemos de traspasar la Última Puerta.
Pero durante nuestra andadura, vamos llenando el petate de odios y amores, de ilusiones y llantos, de alegrías y enfados. De aquellos que quisimos y nos amaron; pero también de los que nos decepcionaron.
Llevamos un libro lleno de cicatrices, donde prensamos flores perfumadas que no queremos olvidar, y donde anotamos los agravios que deseamos extraviar.
Se nos escapa la vida;
Se nos vacía el reloj;
Y, sin embargo, aunque cada vez somos más pobres en Tiempo, somos más ricos en Verdad.
miércoles, 8 de julio de 2015
La serenidad de la brisa fría
martes, 7 de julio de 2015
Frases de cuento que inspiran a la Vida.
En esos cuentos danzan silenciosas unas unas reflexiones que, tal vez, los más avispados lectores puedan aplicar a esa historia que ellos mismos protagonizan...
Frase extraída del relato "Wendy de los Gatos" del libro Reyes de Aire y Agua de Jesús Fernández Lozano.
jueves, 2 de julio de 2015
¿Alguien me recordará cuando se acabe el libro?
Y es que aunque mis vistas no sean bonitas hacen pensar: Cientos de ventanas con cientos de vidas dentro, con sus problemas, preocupaciones, sueños...
Cientos de vivencias que nunca serán contadas. Que pasarán desapercibidas en las páginas de la Historia.
Tal vez como yo.